En la última entrada hablábamos de la cobra de Pugachev. Tras ver este vídeo ahora de un F-4 Phantom, podría pensarse que el piloto trata de hacer una cobra, pero ni al osado Pugachev se le pasaría por la cabeza intentar ésto tras el despegue, por varios motivos, pero ahora mismo se me ocurren dos: porque la altura respecto al suelo (AGL) es mínima si algo no va bien y porque es probable que la velocidad de despegue haga que estemos todavía en el segundo segmento de la curva de resistencia.
De todas formas, bajo mi punto de vista el accidente se debe a una sobrerotación provocando además que el ángulo de ataque sobrepase al de entrada en pérdida para la configuración de despegue. Es por esto que inmediatamente después del despegue se suele volar con una actitud (pitch) fijada. De todas formas es raro ver como aún a pesar de estar el avión en la vertical no se produce una caída de plano o momento de picado (nose-down) acusado, en lo que debe influir el empuje de los motores a gran potencia en despegue.
De todas formas, bajo mi punto de vista el accidente se debe a una sobrerotación provocando además que el ángulo de ataque sobrepase al de entrada en pérdida para la configuración de despegue. Es por esto que inmediatamente después del despegue se suele volar con una actitud (pitch) fijada. De todas formas es raro ver como aún a pesar de estar el avión en la vertical no se produce una caída de plano o momento de picado (nose-down) acusado, en lo que debe influir el empuje de los motores a gran potencia en despegue.
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